lunes, 26 de abril de 2010

Balance

No puedo creer, que vayan nueve meses... Las cosas serían distintas y nunca pretendí volver a poner un pie en Santiago, menos realizar esos viajes maratónicos de fin de semana y es más adoptar un rumbo tan errático como volar a diario :) pero en fin, las cosas han ido mejorando con el tiempo, me siento más viva, más grande aunque a pesar de todo cometo a diario los mismos errores, el último quizás sea una pecado mortal pero no puedo negar que me movio hasta la última fibra de mi alma sin borrarme la sonrisa de los labios por horas.

Soy más feliz un con un pasado guardado en una maleta como estandarte, con los amigos justos y los buenos momentos contados, sin tantas culpas ... sólo conservo una. Aúnque lo acepto el invierno me roba algo de vivacidad y ganas, pero después de mucho soy feliz y plena.

El balance es bueno, estoy sana, llena de cicatrices pues las caídas no son gratuitas y hoy tiempo al tiempo, esperando que su susurro me despierte a media noche o quizás un beso en la mañana. Si no es así el viento me traerá nuevas sensaciones o quizás mañana en cualquier lugar encuentre tus ojos en otro cuerpo.

viernes, 16 de abril de 2010

Sobreviviendo al invierno

Los días transcurren lentos, en una densa niebla, será que llega el invierno y se traga consigo el calor de las calles, pues el otoño ya se llevo el color, cambiándolo por un neutro café quizás todo parece más gris. Santiago es de esas ciudades en que ni las aglomeraciones de gente producen esa ola de calor que revive en invierno, el metro por las mañanas, es un caos de miradas perdidas, el vació se siente más fuerte ahí dentro, nadie se respeta, los empujones y la desesperación son la tónica, la frialdad se apodera de la gente.
Hoy llueve en Santiago, dan ganas de caminar por las calles, es de mañana he terminado una prueba, luego recuerdo que no estoy donde quiero, por más que intento no es lo mismo, la lluvia suele pesar más aquí, donde el olor a tierra húmeda es lo menos que se siente, donde escuchar el sonido de las gotas es un imposible, aún así prefiero retrasar la llegada no esperan muchas cosas, las paredes blancas, siempre me han recordado a los manicomios, sigo caminando, para encontrarme en cada entrada del metro un mendigo sin identidad que parece transparente ante la sociedad, ahora se guarnecen en las escalaras para protegerse de la lluvia que cae inclemente.
Al volver a la ciudad de los ratones, que vagan atareados y medio asustados por la lluvia, pues la selva de asfalto suele inundarse con una facilidad incomprensible, debe ser por eso que la gente vive con miedo a todo, hasta de hablar con quien va a su lado.
Hoy me he percatado de algo, es que en las soledades más perpetuas, suele suceder que alguien con la mirada algo más transparente, aunque sin salir de su mundo propio te alegra la mañana, son dos segundos, pero esa distracción te da esa aura que se necesita para parear la gélida brisa invisible de los edificios de cristal y el cemento que reina durante el invierno, suele durar por tiempo y eso es suficiente para pasar el invierno. Aunque, confieso escapar suele ser la opción más acertada, para sentirse vivo y respirar aire limpio.

lunes, 12 de abril de 2010

Mariposa /Realidad falsificada

Una sonrisa alumbra mi cara
por las noches frente a una pantalla,
detalle, importante
me encierro entre el velo
que me dá ser sin rostro,
y quedan mis alas
donde me refugio
los colores, el tornasol del tiempo
estalla el estruendo
no me conoces y me alegras,
coincidimos en el mismo espacio
en ocasiones creo conocerte desde siempre,
me invade el miedo
de esa alegría virtual cuasi-falsicada
porque de ves en mes
mis alas se gastan
recuerdo aquello que no es real
repito tu nombre en temor de olvidarlo,
sé que existes,
pero de alguna manera en mi vida no eres real,
más de alguna vez,
has sentido lo mismo... quizás
"se ha enredado en tu cabello un cliclón de mariposa"
y en la música que acompaña la canción
sólo a veces creas escuchar, entre susurros mi voz
recordando que no la conoces, la construyes
intentando que esa mariposa no muera
en el intento de adornar las mañanas.

sábado, 10 de abril de 2010

Contigo.

Te encuentro
Incorpóreo,
Escondido
Subterráneo…

Entonces
Te cojo con esa fragilidad
Sólo otorgable a un recuerdo.

¿Me recuerdas?
Las lágrimas, las espinas,
Las calles, el metro por las mañanas
Atochado de tanto vació,
De tanto dolor agazapado,
¿Serán sólo las mañanas?

Te encuentro,
Menguado tras la niebla
Te encuentro
Tramando planes,
Escribiendo nuestros nombres en la arena
Y conmigo va el agua,
Para borrar tus melódicos pasos
Aun presente,
Estás,
Pero te borrará
La marea.

Aunque esta noche,
Te encuentro y me dueles
Aunque han pasado los años
No puedo negarlo
Los resquicios de tu voz
Me arrancan sonrisas por asalto.

Y te vuelves inofensivo
Y vuelves a juguetear con mi cabello
A jurarme amor por siempre
Aunque siempre duró
Un milimétrico segundo
Y estalló.

Contigo
Es más fácil,
Te siento constante
Será que sigues ahí
Entre asalto y asalto,
Incorpóreo y presente,
Si eres deseo inconsciente,
Desdén de un alma masoquista,
Al decir yo
Conmigo estás tú.